Juan Carlos Coronel
historia de éxitos
Por ALVARO ALMENDROS
Indudablemente estamos en presencia de una voz privilegiada para interpretar canciones en
todos los géneros: la de éste cartagenero que a los seis años por primera vez
participó en un concurso intercolegial y a los siete ganó el Festival de la Canción de
las Empresas Públicas de Cartagena, en competencia con 40 voces profesionales. Este
triunfo le sirvió para hacer presentaciones en el Grill Portobelo, del Hotel Caribe, y a
los ocho años era el show central de los paseos turísticos de los yates Alcatraz, a
través de la Bahía de Cartagena.
En 1976, con otros músicos universitarios, integró el grupo Casanova, de música
tropical.
Cuando cumplió sus 14 años, Wady Badrán lo llevó a Discos Fuentes y grabó su primer
disco con el grupo Afrosound. Más tarde es contactado para grabar con Fruko y sus Tesos,
al lado de Wilson Saoco y también con The Latin Brothers.
Posteriormente entra a la del Nene y sus Traviesos, con la cual graba varios discos de
larga duración, de música tropical. De esas grabaciones las más exitosas fueron:
En 1985: Patacón pisao, Se me cae, se me cae, El
ventanal
En 1986: Juan José, Arroz con manteca.
En 1987: Kikirimiau.
En 1989: Baracaníguara, No la dejo de querer.
En 1990: Ayer la ví, Y tú no estás.
Aquí termina esa etapa de música tropical que fue de gran sensación, sobre todo por
Patacón pisao (autor: Ramón Chaverra) hasta el punto de que el gran
conocedor de la música colombiana y de la costeña en particular el
antioqueño Hernán Restrepo Duque (q.e.p.d.) tituló un artículo suyo, aparecido en la
revista Diners: Los patacón pisaos de muchos diciembres, para significar los
grandes éxitos que se han dado en la música de nuestro país para la época decembrina,
poniendo como paradigma el éxito de Juan Carlos Coronel, que sonaba intensamente por la
época, y que mantuvo su popularidad en años siguientes.
Luego vinieron en 1991 Me estoy enamorando y en 1992 Amor en
silencio. Por esta época aparece en el ámbito de la balada. De esta etapa puedo
resaltar que en 1991 fue escogido por nuestro país para representarnos en el Festival de
la OTI, celebrado en Acapulco, México, en donde defendió el tema Consejos-Canción
a mi hijo del compositor Conrado Marrugo, que ocupó un destacado segundo lugar
entre 26 participantes, la más alta posición alcanzada por nuestro país en la historia
de estos importantes festivales.
Hay una tercera fase de su vida musical, cuando le hace un homenaje a compositores
costeños con su álbum Abrazando mi cultura, en donde se destacan los
éxitos: Caprichito, Te busco, Salsipuedes, del
maestro Lucho Bermúdez.
La cuarta etapa la constituye el testimonio de admiración que le rinde a varios cantantes
de la Sonora Matancera: Leo Marini, Boby Capó, Johnny López, Alberto Beltrán, Vicentico
Valdez y Celio González; interpretándoles algunos de sus boleros. Titula este trabajo
Tributo romántico. Canciones contenidas en este álbum son: En la palma
de la mano, Yo vivo mi vida, Caribe soy, Piel
canela, Luces de Nueva York, Aunque me cueste la vida,
Ignoro tu existencia, El diecinueve, Los aretes de la
luna, Sólo por rencor, Total, Quimera fugaz.
Su quinta etapa es la actual, en ella ha lanzado el álbum Cancionero del
amor, en él interpreta música del interior de Colombia: bambucos, valses y
pasillos, entre los que puedo destacar: Cuando voy por la calle (Jaime R.
Echavarría); Oropel (Jorge Villamil); Pueblito viejo (José A.
Morales); Amor se escribe con llanto (Alvaro Dalmar); Espumas
(Jorge Villamil); Yo también tuve veinte años (José A. Morales); Soy
colombiano (Rafael Godoy) y Noches de Cartagena (Jaime R. Echavarría)
Lo que constituye un aporte a la paz y la convivencia entre los colombianos, además de
integración, el hecho de que un costeño interprete la música de los compositores del
interior del país.
También, y para concluir, debemos observar que se trata de un artista joven aunque
ya consagrado que ha explotado una amplia gama de géneros musicales con gran éxito
y que no se cansa de experimentar, para transmitir al público todo su sentimiento a
través de su polirrítmica voz.
MATERIALES CONSULTADOS:
Artículo: Los patacón pisaos de muchos diciembres. Por Hernán
Restrepo Duque. En revista Diners No. 189. Diciembre de 1985. Pags. 92-97.
Jiménez Urriola, Roque. Breve Historia de la música popular costeña.
Editorial Antillas. Barranquilla, 1992. Pags. 36-47.
De la Espriella Ossío, Alfonso. Historia de la música en Colombia a través
de nuestro bolero. Primera edición. Editorial Norma S.A. Santafé de Bogotá. 1997.
Pag. 346.
Artículo: Coronel le canta a la música colombiana, Patricia Escobar.
En EL HERALDO mayo 25/00. Pag. 1B.